Lucas Fox se complace en presenta esta pequeña masía de piedra en lo más profundo de la Garrotxa, en un tranquilo entorno natural, rodeado de bosques frondosos con un paisaje rural sin construcciones aledañas. La masía se asienta sobre una parcela de 8.500 m² con espectaculares prados verdes, árboles maduros y vistas abiertas al recóndito entorno boscoso circundante. La vivienda cuenta con una superficie de 244 m² construidos distribuidos en dos plantas —ambas con acceso independiente—. Conserva su carácter original y ofrece múltiples posibilidades de uso: hogar privado, proyecto turístico, espacio creativo o retiro espiritual. En su interior, se disponen tres dormitorios y dos baños que conforman esta estructura sencilla, bien proporcionada y lista para actualizar. La planta superior acoge una acogedora sala con chimenea, perfecta para pasar tiempo en familia. Toda la casa dispone de calefacción por gasoil, para un gran confort durante todo el año, incluso en los inviernos más intensos. Aunque el interior necesita renovación, su tamaño contenido y su sólida base permiten concebir una rehabilitación fácilmente, que mantenga su carácter rústico y que potencie la conexión con el entorno. Póngase en contacto para más información.
