Si estás buscando una vivienda realmente especial, esta propiedad te va a sorprender. Ubicada en una de las calles más céntricas y tranquilas de Pineda, combina el encanto de las casas clásicas con el confort de una reforma actual. Se trata de una primera planta con terraza a ras de comedor en un edificio con ascensor. Al entrar, llaman la atención sus techos altos de hasta cinco metros y los grandes ventanales que inundan cada estancia de luz natural, creando una sensación de amplitud y calidez difícil de encontrar. Las puertas de tres metros aportan un toque de distinción que realza aún más el carácter de esta vivienda única. El edificio ha sido completamente rehabilitado, ofreciendo todas las comodidades modernas sin renunciar a la esencia original. Con sus 81 m² perfectamente distribuidos, cada rincón ha sido aprovechado al máximo. En el exterior, una terraza de 41 m² ofrece un espacio ideal para disfrutar con familia y amigos de las tardes soleadas en pleno centro de la ciudad. Una propiedad con alma, pensada para quienes valoran los detalles, la luz y la personalidad. [IW]