Las fincas rústicas en Ardales ofrecen una amplia gama de posibilidades para sus propietarios. Algunas de las actividades más comunes incluyen la agricultura, la ganadería, la apicultura, la producción de aceite de oliva o la cría de animales de granja. Además, muchos propietarios también disfrutan de actividades de ocio y recreación, como el senderismo, la equitación o la pesca en los ríos cercanos.