Al evaluar la compra de una finca rústica en Plan, es importante considerar aspectos como la calidad y fertilidad del suelo, la disponibilidad de agua, la infraestructura existente (como caminos, cercas y edificaciones), la accesibilidad y la cercanía a servicios básicos. También es importante analizar el potencial de la finca para el desarrollo de actividades agrícolas, ganaderas o turísticas.