- new
- Top
House or chalet with terrace in Montmar
- 4 rooms ·
- 3 bath ·
- 302 m² ·
- Parking ·
- Terrace ·
- Balcony ·
- Heating ·
- Air conditioning ·
- new
- Top
LA CASA DONDE LA LUZ ES JOYA. En Montemar Bajo de Castelldefels allí donde el silencio tiene forma de brisa y la montaña conversa con el mar, se alza una casa que no fue simplemente construida… fue esculpida. Sus propietarios, entendieron desde el principio que un hogar también puede ser una pieza única. Y así, con la misma entrega con la que se talla un diamante, dieron forma a cada estancia, cada ángulo, cada rayo de luz. Sobre una parcela esquinera de 739 m², esta vivienda de líneas serenas se despliega como un collar que abraza la piel. Su estructura de dos plantas —con accesos independientes— no solo ordena el espacio: le da ritmo, le da vida. La planta principal se abre con un recibidor que sabe a bienvenida. La cocina, bañada por la claridad del sur, respira a través de un gran ventanal y una puerta acristalada que parece invitar al día a quedarse un poco más. El comedor, con su techo abuhardillado y sus vigas de madera, es un refugio cálido donde la luz cae con la delicadeza de un engaste perfecto. Desde allí, la mirada vuela hacia el gran salón de la planta baja, como quien recorre una cadena hasta encontrar la pieza central. La zona de noche es un universo íntimo. Dos habitaciones convertidas en un único espacio amplio, coronadas por un altillo que invita a imaginar: un rincón de cuentos, de estudio, de sueños. Desde este lugar nace una terraza de 20 m² que se abre hacia la montaña, como si la casa respirara hacia afuera. A un lado, una suite con vestidor y un baño que combina bañera y ducha en una composición perfecta. En la planta inferior, una escalera minimalista desemboca en un salón amplio, casi escénico, de más de 50 m². Un espacio donde las horas parecen transcurrir más despacio. Con zona de despacho, habitación doble, bodega, baño completo y acceso independiente, esta planta es pura versatilidad: hogar, estudio, refugio, inspiración. El jardín rodea la casa como un brazalete que protege su centro. Rincón tras rincón, invita a detenerse, a respirar, a celebrar. Sus dos accesos permiten aparcar hasta cuatro vehículos, pero aquí el verdadero lujo no es el espacio: es la calma. Esta propiedad no es una vivienda. Es una pieza creada con sensibilidad, intuición y belleza. Un hogar donde la luz se convierte en joya y la vida… en diseño.
