Al evaluar una finca rústica en Marçà, es importante considerar aspectos como el estado de las estructuras y construcciones, la calidad y el tipo de suelo, la disponibilidad de agua, la accesibilidad y las posibilidades de uso de la tierra. También es recomendable analizar la normativa local y las posibles restricciones de uso para asegurarse de que la finca se ajusta a sus planes.